Un sólo deseo?! Porqué tan tacaño!? Bueno, está bien, deseo que me cumplas todos los deseos, Oh! masculino Efrit y poder ir al primer día del Cosquín Rock porque tendria 5 pájaros en la mano, y que no naufrague nunca mi viejo y que no se le cumpla ese deseo que yo sé que el tiene por debajo de las aguas de su conciencia, y que ella se cure y que mamá abra la puerta cuando pase a visitar mi casa primigenia y me diga a mí eso que le dijo a otro pero no me quiso regalar cara a cara antes de irse, la muy sentimental. Deseo que él no me hubiera lastimado así o haber podido lastimarlo, y que no se hubiera muerto así sufría más y poder olvidar o ser más sabia y no sentir todo tanto o hacerle caso a Rilke y directamente, olvidar; y que todos los perversos del mundo se ahoguen en su verde veneno y mueran y no haya que desear matarlos. Deseo que los niños tengan ejércitos de dioses que los cubran con sus poderosas manos y los escondan del mal. Deseo que todo se desenvuelva rápido y que no suframos más de la cuenta y que los pájaros se aviven y se posen en la ventana del tercer piso y descubran el alpiste antes de que el viento sureño haga lo que siempre hace y robe todas las semillas el muy descarado y sagaz. Deseo que no sea cierto eso de que las aves nacidas en cautiverio mueren al ser liberadas y tambien deseo encontrar secuaz para rescatar o robar (como quieras) esos tomos sagrados que una bruja ignorante y oligarca tiene en el polvo del olvido de una biblioteca de una casa de veraneo de un pueblo entre ríos y sierras y que instruye arañas culonas y negras que se saben ya las páginas enteras de memoria, y que mi hijo pueda leerlos cuando quiera o que quiera que yo se los lea por las noches o siestas o mañanas o madrugadas. Deseo que tenga motivos para admirarme y no que lo finja sólo porque yo le haya prestado mi cuerpo y sea su progenitora. Deseo merecerme el título de Madre y estar a su altura en nuestras circunstancias.
(Pero qué mirada más penetrante, oh gran Efrit!) Deseo llegar a Necochea y comprarme un velero y surcar, rauda, los ríos y los mares y que Basilio Argimón me divise desde sus alturas y descienda a mí, para leerme Las Mil y una noches una y otra vez.
Deseo nunca dejar de caminar secando mis máscaras y verlas caer una a una resecas de tanto sol y éter y poder tener una yegua similar a la que me habían prometido pero se olvidaron y regalaron otro niño y que mi galgo no se maree con el agua y que exploten todas las papeleras del mundo y que volvamos a las fuentes y no morir en el río Aluminé, ahogada de tristeza por lo que no fué, por esa botella con ese mensaje que nadie encontró y sigue ahí, en el fondo o la costa de sus verdes aguas.
Deseo que entre alguna clienta con viento o sin él, porque tengo que pagar la luz y vendí sólo $70 (2 aritos de $20 y un anillo de coco y nácar de $30)... Deseo no tener tanto deseo o encontrar a alguien que desee igual...
Fiufffff... Podés descansar por ahora, andá por los aires a seducir doncellas, o mejor a raptarlas... o mejor quedáte cá conmigo, me estás cayendo simpático así, tan azul y lustroso, tan de lbios gruesos y ojos terriblemente negros... Te convido un mate, es con yerba Don Bosco, con gusto a río y libertad.